El director de la empresa Renovables, que instala sistemas de energía renovable, explica por qué estos equipos son rentables tanto para uso doméstico como para uso agroindustrial. Si para muestra basta un botón, la propia empresa funciona en su totalidad gracias a sistemas de energías renovables.
Con Rolando Ringeltaube, Director de la empresa Renovables
Entrevista emitida el viernes 12/09/08 en Producción Nacional – 1410 AM LIBRE
Alejandro Landoni – Renovables es una empresa uruguaya que se fundó en el año 2003, dedicada a la venta de sistemas de energía renovable. La empresa proyecta el sistema en una locación determinada, instala los equipos y, si fuera necesario, incluso ofrece el mantenimiento.
Esta empresa está trabajando con cinco fuentes de energía alternativa: solar, eólica, biomasa, energía térmica y también hidráulica. Tienen alrededor de 300 clientes y más de 600 proyectos funcionando. Incluso para predicar con el ejemplo, la empresa Renovables funciona totalmente con energías alternativas. Tienen sus oficinas en Toledo donde no utilizan la energía de UTE e incluso los vehículos de la compañía funcionan con aceite vegetal de girasol.
¿Cómo surge la idea de esta empresa?
Rolando Ringeltaube — En 2003 formalizamos nuestra actividad a través de una sociedad anónima, que fundamos para realizar las instalaciones y el montaje de estos sistemas en el medio rural, que es donde principalmente comenzó la demanda de fuentes de energía para cubrir la demanda eléctrica y térmica. Esos fueron los comienzos en el año 2003.
A.L. — La demanda eléctrica y térmica ¿básicamente en comunidades aisladas o en cascos de estancia o en lugares donde no se daba la red de UTE? Le pregunto porque hoy hay un furor de la energía alternativa, el precio del petróleo, ahora la suba del gas, la falta de agua en las represas. Pero en el año 2003 instalar una empresa de este tipo realmente me imagino que fue una decisión difícil.
R.R. — Ya habían algunos antecedentes en Uruguay en cuanto a instalación de sistemas de energías renovables, por eso nosotros lo que quisimos fue darle “una vuelta de tuerca” a ese tema y formalizarlo, y realizar sistemas realmente ajustados a la necesidad de cada cliente y buscando más que nada equipos sumamente confiables, de larga vida útil y de alta confiabilidad.
A.L. — En aquel entonces, —no sé si ahora los hay—; pero, en aquel entonces no había ningún subsidio para aquel que quisiera instalar un sistema de este tipo. ¿Cuál era la llave para ofrecérselo a los clientes?
R.R. — Más que nada empezó para aquellos clientes que estaban alejados de la red de UTE y tenían una necesidad eléctrica o térmica.
Hasta el momento no hay un subsidio para este tipo de equipos. Hay que especificar que al día de hoy, el único alivio que hay es la exoneración de IVA de los aerogeneradores. Todos los componentes que conforman además un sistema de estos, no están exentos. Estamos hablando de costos principales; toda la electrónica, baterías y accesorios. Esos no están exentos.
A.L. — Así que esto comenzó en el medio rural, básicamente para gente que estaba alejada del sistema eléctrico, del tendido de la red eléctrica de UTE. Después vamos a ir viendo cómo en estos años fue variando un poco ese concepto original, pero: ¿cómo le puede explicar a los oyentes cuáles son los equipos que están instalando? Ringeltaube trajo una carpeta donde hay realmente decenas y decenas de fotografías de equipos en base a estos cinco tipos de energía renovable que les contábamos al principio. ¿Cómo podría usted sintetizarnos para comprender mejor?
R.R. — Voy a hacer una breve reseña. Nosotros comenzamos tímidamente con sistemas solares fotovoltaicos, para alimentar necesidades de energía eléctrica principalmente para iluminación o algún consumo relativamente bajo, pero como decía, en el medio rural.
A.L. – ¿Fotovoltaico es esa plancha como plateada, que capta la energía del sol?
R.R. — Es un panel que transforma los rayos solares en energía eléctrica. Eso tiene miles de aplicaciones diferentes, pero nosotros comenzamos con pequeños sistemas aislados para iluminación y después realmente en muy pocos años pero en el medio rural, fue creciendo la demanda, cada uno de los usuarios finales sacaba sus números y decía: “bueno, ¿acá me justifica generar mi propia energía en un sistema aislado o conviene traer una línea de UTE a lo largo de muchos kilómetros?”. Ahí es donde por una necesidad económica empezaron a desarrollarse sistemas de energía renovable.
Como al principio la demanda era chica, se utilizaron más que nada paneles solares. A partir del año 2004-2005, la incorporación de aerogeneradores fue tomando cada vez más fuerza y hoy le diría que es la principal fuente de generación de energía de las cinco que mencionamos; la principal fuente de generación para sistemas autónomos.
A.L. — ¿Qué diferencia hay con aquellos viejos molinos de viento, de chapa, que uno está tan acostumbrado a ver en el campo uruguayo?
R.R. — No hay una diferencia específica. Lo que se ha desarrollado en los últimos años es el diseño de las aspas, el diseño aerodinámico y la eficiencia de cada uno de los aerogeneradores desde el punto de vista de eficiencia dinámica. Pero además se desarrolló, —y muy bien— la electrónica que acompaña estos equipos. Estamos hablando de aerogeneradores de larga vida útil, sin mantenimiento. Las aspas mayoritariamente se fabrican en fibra de carbono, o sea que la degradación de esas aspas es muy baja por lo tanto mantienen una elasticidad durante muchísimos años.
A.L. — ¿Cómo cuántos años?
R.R. — Más de treinta años.
A.L. — La fibra de carbono debe de ser carísima.
R.R. — Depende de en qué escala de fabricación estamos hablando. Si nos ponemos a fabricar un aerogenerador, nos va a costar muchísimo, pero estamos hablando de empresas que suministran o fabrican este tipo de equipos de a decenas de miles por año.
A.L. — Es decir que son importados.
R.R. — Sí, los que nosotros instalamos son todos importados y una característica muy especial, es que comparados con los antiguos y conocidos aerogeneradores en Uruguay, los clásicos Wind Charger, es que los equipos actuales no tienen ningún tipo de desgaste de contactos eléctricos. Son aerogeneradores de imán permanente que no tienen ningún tipo de desgaste salvo en los rulemanes, que un mismo fabricante, —según el lugar de origen—, dice que cada 10 o 20 o 30 años conviene sustituirlos”.
A.L. — Les cuento a los oyentes que estoy viendo dentro de esta amplia carpeta con decenas de equipos que instaló esta empresa, un clásico molino de viento de los que se ven en los campos uruguayos con sus aspas, muchas aspas (no sé cuántas serán, pero deben ser casi 20) que uno las ve como de chapa plateada y que abajo en la torre tienen tres grandes paneles con energía solar.
R.R. — Exacto. Genera además energía eléctrica.
A.L. — Es decir que juntan este aerogenerador con la energía solar en un mismo sistema.
R.R. — Es una excelente combinación. El viento en nuestro medio es muy importante; el potencial eólico que tenemos en Uruguay es muy importante, pero la combinación con la energía solar es muy buena. El principal potencial de viento se da durante el invierno, pero cuando hablamos quizás de un sistema de riego, su principal demanda está en verano y ahí el complemento de la energía solar es ideal. Cuando más sol hay más bombeo tenemos y esos paneles están a veces conectados a una bomba eléctrica que extrae agua en el momento que hay sol. No hay acumulación en baterías en ese caso.
A.L. — También veo en esta carpeta una boya de esas que están en el mar para guiar a los barcos que trabajan con energía solar. Veo también una torre de alumbrado público que está instalada en Río Negro y que arriba tiene un panelcito solar.
R.R. — Sí, es una lámpara autónoma.
A.L. — Y veo otra que usted me decía anteriormente que está instalada en la propia estancia Anchorena.
R.R. — Sí, también. Iluminación de accesos.
A.L. — Está bueno. ¿Eso es caro para una familia o para una empresa chica?
R.R. — Mencionamos hoy la viabilidad de todos estos sistemas cuando estamos alejados de una red de UTE. Ahora también hay determinadas aplicaciones que perfectamente son competitivas, especialmente cuando miramos muchos años para adelante. Primero, la inversión en sí misma hay que amortizarla y obteniendo la red de UTE solamente la podemos amortizar considerando el costo de la energía, por eso hay que analizar cada situación y para esa situación diseñar el sistema correspondiente para que esa fórmula se de.
A.L. — Para que ahí “cierren las cuentas”.
R.R. — Sí.
A.L. — ¿Cuál es el funcionamiento de la empresa más allá de estos aspectos? Por ejemplo, si ustedes tienen que instalar una torre como se ve en estas fotografías que nos trajeron o toda la parte electrónica y los propios sistemas eléctricos, ¿eso lo hacen ustedes aquí en Uruguay?
R.R. — Sí. Nosotros brindamos todo el servicio. Algunas partes de nuestros equipos o de las instalaciones especialmente se tercerizan, pero básicamente ante la necesidad de un cliente, primero hacemos un análisis de cuál es realmente la demanda que tiene y en base a eso se hace un estudio en nuestras oficinas y de ahí surge el proyecto propiamente dicho. En ese proyecto se analizan conjuntamente las diferentes opciones, incluso precios pormenorizados; ver cuáles serían las alternativas más adecuadas al cliente, a sus posibilidades y a sus necesidades. Y luego, en la etapa de construcción sí se realizan en diferentes momentos el montaje de todo el sistema. Ahora, es relativamente rápido entre que se presenta un cliente y podemos instalar finalmente (ya en mano) el sistema, se realiza más o menos entre 15 días y como máximo un mes.
A.L. — ¿Ustedes trabajan en todo el país?
R.R. — Sí, y la ventaja es que tenemos todos los equipos o la mayoría de ellos en depósito, por eso tenemos un plazo relativamente corto para el montaje.
A.L. — ¿Cuánta gente trabaja en Renovables?
R.R. — Directamente en la empresa somos ocho personas, distribuidos entre los administrativos y gente de taller, electrónicos y con ese staff llevamos adelante esta empresa, pero también subcontratamos otras empresas para obras civiles o eléctricas según las necesidades y la envergadura de la obra y también hay que tener presente que a veces las distancias son muy grandes. Entonces, si podemos contratar gente local eso favorece al cliente final porque baja los costos.
A.L. — Estos más de 300 clientes que a su vez muchos tienen más de un equipo funcionando ¿quiénes son?, ¿son empresas, son particulares?
R.R. — Principalmente son empresas rurales, que tímidamente comenzaron cubriendo sus necesidades básicas y después fueron ampliando sus propios sistemas y a veces en algunos casos tienen sistemas de agroindustrias en forma autónoma.
A.L. — Se entusiasmaron.
R.R. — Sí, una persona que realmente comienza a utilizar inconscientemente y con un sistema acorde estas ventajas, se empieza a auto convencer cada vez más de que esto se paga en sí mismo; le brinda una satisfacción adicional y además un servicio ininterrumpido que eso es lo que se busca.
A.L. — Mirando las fotografías he visto que hay equipos chicos y equipos muy grandes, incluso en esta carpeta hay una fotografía aérea de una cuadra más o menos de paneles solares que están en un campo.
R.R. — En Uruguay se ha desarrollado mucho la energía eólica y también la utilización de paneles solares es una alternativa muy válida. Sin duda eso también depende del capital disponible para el sistema y además de la vida útil de todos los componentes. Cuando comparamos diferentes fuentes de generación es importante tener presente la vida útil de cada componente, especialmente los paneles solares fotovoltaicos; los que generan energía eléctrica a partir del sol, que promedialmente hablan de garantías de generación de 25 años, y los aerogeneradores se venden hoy con garantías de 5 años. Hay una diferencia clara, muy bien marcada.
Entonces cuando un cliente dice: “hoy tengo la opción de invertir en un sistema de generación y que me dure por más de 30, 40, 50 años sin o con muy bajo mantenimiento”, una opción válida es justamente la solar fotovoltaica. Como complemento además están las otras fuentes que mencionamos hoy: hidráulica, micro hidráulica que es la que nosotros hacemos y hay que ver si las condiciones se dan, si hay un arroyito, si podemos generar una represa con una diferencia de nivel importante que no en todos los lugares en Uruguay lo prestan, pero sí hay.
A.L. — De hecho a la licitación de UTE de generación en microturbinas no se presentó nadie. Fue el único rubro que quedó vacío. Una persona que nos está escuchando puede estar pensando: “Yo instalo estos paneles solares, estos aerogeneradores y si estamos en un lugar lejos del tendido eléctrico es lo que tengo y lo poco o lo mucho que me dé está bien”. Ahora, ¿qué pasa si un día está nublado o no hay viento? Puede ocurrir que algún día no se pueda generar energía y esa agroindustria, o ese riego, se tenga que detener.
R.R. — Dentro del diseño de un sistema se contemplan el promedio de generación (ya sea: eólica, solar, térmica); se busca dentro del diseño, se evalúa el promedio de generación. Y también se contemplan los días nublados, y esa energía en esos momentos la tenemos que sacar de una batería. Por eso también en el rubro de baterías insistimos mucho en buscar equipos o componentes de muy bajo o nulo mantenimiento y esa batería es la que cumple la función del puente entre lo que es generación y consumo. Por ahí el consumo es a destiempo de la generación y de algún lado lo tenemos que sacar. Cuando luego vuelve el sol, seguimos atendiendo los consumos, pero el sobrante de generación se va volcando a la batería y así recuperamos de nuevo suficiente reserva para el próximo evento donde no haya suficiente generación o un pico de consumo.
A.L — La empresa Renovables predica con el ejemplo, pues en el material que nos enviaron para preparar esta entrevista vimos que en sus oficinas de Toledo ustedes no utilizan, desde ya hace 2 o 3 años, la energía de UTE y que incluso a sus vehículos les echan dentro del combustible, aceite vegetal de girasol. ¿Cómo es esto?
R.R. — En nuestra empresa desde ya hace unos cuantos años, tratamos de ser autónomos y predicar con el ejemplo. Nuestras oficinas, el showroom, los talleres, el depósito…. todo funciona básicamente a partir de la energía eólica y solar fotovoltaica. Almacenamos en baterías como mencionamos hoy, y siempre los consumos son en 220. Es un equipo, un inversor de corriente que transforma la energía que genera (ya sea el panel o el molino), a 220.
A.L. – Eso es interesante, siempre es a 220 w.
R.R. — Se estandariza; la demanda va en ese sentido de utilizar siempre los mismos electrodomésticos que en cualquier otra casa normal, o industria normal.
A.L. – Lo que le permite que sin un día un particular se está quedando sin energía o le funciona mal la batería, si está enchufada a la red eléctrica de UTE puede usarla.
R.R. — Incluso en sistemas de energía renovable, muchas veces se contempla también la utilización de un generador (que ya sea a diesel o a nafta), pero que prende justamente para cubrir esos eventos de mayor consumo o si en algún momento la batería está al mínimo, en ese momento puede prender incluso automáticamente el grupo electrógeno. Y es recargar la batería y atender los consumos. Estamos hablando de un sistema que permite una confiabilidad muchísimo mayor. Uno diseña un sistema para cubrir el 80 o 90% de los consumos y el 10% eventual lo cubrimos con una fuente en firme como un grupo electrógeno.
A.L. — Y el sistema funciona para ustedes desde hace años a nivel de las oficinas y ¿cómo es el tema este de los vehículos? ¿Qué aceite vegetal…?
R.R. — Aceite de girasol, semilla de girasol prensada, filtrada y directamente como sustituto de combustible.
A.L. — ¿100% o es un agregado que le hacen?
R.R. — Cualquier mezcla, ya sea desde el 0 al 100% de….
A.L. — ¿Y funciona?
R.R. — Perfectamente utilizable.
A.L. — ¿Y qué pasa con los mangones, con todas las partes internas del motor?
R.R. — Esa es la gran diferencia, estamos hablando de aceite vegetal, no biodiesel. Aquí estamos hablando de un aceite natural ciento por ciento, sin ningún aditivo, que puede ser utilizado 100% como alternativa al gasoil.Sí requiere de algunas leves precauciones, (no modificaciones), especialmente en invierno. El aceite puro, tiende a solidificarse o a quedar más denso y eso puede llegar a daños en el sistema de inyección. Es la única parte que hay que contemplar.
A.L. — ¿Y cómo arreglamos esto?
R.R. — Para eso existe el sistema de precalentamiento del circuito del suministro del combustible, ya pueden ser eléctricos o con intercambio del propio circuito de refrigeración del motor. Esta es una opción. La otra es, el sistema de doble tanque, donde el vehículo arranca con gasoil y apenas entibia, —otra vez con el mismo circuito de refrigeración—, y ahí se pasa a consumir 100% el aceite de girasol.
A.L. — ¿Qué sistema usan ustedes? En las fotos veo que tienen dos camionetas 4 x 4.
R.R. — Sí, 4 x 4 Nissan que funcionan con aceite 100% de girasol.
A.L. — ¿Tienen el sistema de precalentado?
R.R. — Nosotros precalentamos el aceite en invierno, en verano no es necesario.
A.L. — ¿Y el aceite lo compran o lo hacen ustedes?
R.R. — Estamos en este proceso, tenemos ahora en nuestras instalaciones una Secadora y vamos a tener una Planta de Silos para tener nuestro propio almacén de granos y allí mismo vamos a producir nuestro propio combustible, y los granos vamos a adquirirlos de algunos productores amigos.
A.L. — ¡Qué bueno e interesante!
R.R. — Interesante y además es rentable.
A.L. — Eso es lo más importante. Yo lo entrevisté a usted y a su señora varias veces a lo largo de estos años en Producción Nacional, porque eran los propietarios de Rancas, una empresa que criaba ranas Toro (unas ranas grandísimas), para faenar porque las vendían en churrasco y también vendían el cuero de la rana. ¿Sigue vinculado a las ranas?
R.R. — No. Esa empresa ya se cerró, lamentablemente hace mucho y fue una actividad a la que le pusimos muchísimo entusiasmo.
A.L. — Recuerdo que querían hacer una Planta para faenar con vías para la exportación.
R.R. — Sí, pero hubo algunas trabas más que nada políticas (digámoslo así), y concluimos que no tenía más sentido seguir invirtiendo en una actividad no tradicional que realmente nos llevaba al agotamiento. Pusimos mucha energía y realmente no tuvo su ganancia.
A.L. — Y que necesitaba permisos sanitarios, me imagino.
R.R. — Como cualquier cría de animal no tradicional, no era tan complicado pero básicamente era un tema tributario en el cual la empresa de producción, —por supuesto, no podía vender el producto final—, pero como una actividad netamente agrícola los insumos nunca quedaron exentos de IVA y ese IVA de compra no lo podíamos volcar a la empresa que comercializaba la venta, entonces teníamos por los dos lados una carga impositiva muy elevada que hizo que fuera imposible seguir adelante.
A.L. — Me queda la certeza de que usted siempre está vinculado a emprendimientos sumamente innovadores.
R.R. — Quizás innovadores para Uruguay, en su momento cuando nos dedicamos a la cría de ranas sacamos la idea de otros países, incluso limítrofes, y luego profundizamos más en el tema. Y con las energías renovables ocurre lo mismo. En Uruguay desde hace muchísimos años se aplica energía renovable. En el campo como decíamos hoy los viejos molinos Wind Chager, o los molinos de viento para bombeo de agua, tienen más de 50 años en Uruguay. Lo que hemos hecho es, dar esa “vuelta de tuerca”, averiguar en el resto del mundo cuál es la tendencia y seleccionar nosotros mismos los equipos que realmente son los más confiables y que nos dejan bien parados con estos sistemas. Visitar muy frecuentemente Ferias, principalmente en Europa y Estados Unidos, que son los mercados que más marcan en el rumbo de las energías renovables, y aplicar en Uruguay aquellas que nosotros consideremos de mayor sentido y que nos permitan aplicar cosas que de acuerdo a las condiciones en Uruguay sean rentables.
A.L. — En Argentina, hay un pueblo, Venado Tuerto, una comunidad en particula,r donde se utilizan muchas energías renovables y hay rebajas tributarias a aquellos que implementan sistemas de energías y permisos de construcción para las casas que prevén que puedan tener algún tipo de generación de energía o que por lo menos aprovechen bien la energía, y nada de eso existe en el Uruguay.
R.R. — Se está trabajando. Digámoslo así. Especialmente para el área de energías solares térmicas se está desarrollando un programa con el fin de promover ese tipo de fuente y que en definitiva le aporta a nuestra matriz energética un alivio muy importante.
en mi opinin esta es una de las lecturas mas interesantes de mi vida es algo algo exotico ya que esta escrita pr un admirador mio :)))))))9 xdxdxdxdxdxdxdxdxdxdxdxdxdxdx quisde
Existen numerosos procesos industriales en los que resultan de aplicación las energías renovables. Debido al elevado consumo energético de los mismos, la utilización de energías renovables proporciona un ahorro importante de energía convencional, cara y contaminante.